Está vez nos envían una carta (en inglés para añadir un poco más de confusión) en la que nos informan de que nuestro número de operador intracomunitario se ha perdido. Por supuesto, la letra, apariencia y algunos datos que se incluyen (por supuesto de acceso público) le dan al un aire oficial.
El número VAT que nos solicitan es un requisito necesario para ahorrarnos el IVA en las compra-ventas efectuadas a con otras empresas miembros de la UE. Se trata de un dato público, basta con introducir un número VAT en el VIES para comprobar la empresa con la que está asociada.
Ya sé que lo obvio es no firmar, pero si cometemos el error, sinceramente (y con todas las precauciones que tiene una opinión lanzada al vuelo) ignoraría todos los intentos de cobro por parte de estos estafadores. Puede que nos amenacen con introducirnos en una lista de morosos o similar, pero la verdad, si el tema va a mayores ningún tribunal del mundo daría por bueno este fraude de contrato.
Eso sí, mucha atención que estas estafas se están enviando ahora, una época tradicionalmente con mucha carga de trabajo en muchos sectores.